La compañía Volvo Bus que
cuenta con más de 1.500 buses en el sistema Transmilenio de Bogota, tiene la
meta de seguir aumentando su presencia en el país bajo la estrategia denominada
electromovilidad. Volvo, inicio diálogos con el Distrito de Bogotá en conjunto
al mismo tiempo que realiza negociaciones con el grupo eléctrico Codensa, con
el cual se pretende realizar la firma de un acuerdo para la administración de
energía para los buses híbridos (electricidad-diesel).
Esto afirmo Hakan
Agnevall, quien se desempeña como presidente de la división de buses a nivel
mundial, Agnevall afirmo que Colombia, y en especial la Capital es un mercado
muy importante para la marca, ya que es una de las ciudades en el mundo donde
se encuentran más de 300 híbridos circulando.
El dirigente afirmo que
la compañía se encuentra muy interesada en seguir acompañando a Transmilenio en
las nuevas troncales que se construyan asi como en la renovación de la flota. Luis
Pimenta, presidente de Volvo Bus para América Latina agrego que hay un gran
interés en participar como proveedor de vehículos para sistemas de transporte público
en las ciudades de Cali y Medellín.
Las negociaciones con
Codensa, quien se encarga del 100% de la energía eléctrica de Bogotá, y las
firmas involucradas con Transmilenio, se centran en la definición del
suministro de energía para las estaciones eléctricas que se deben construir en
los corredores donde operen los buses.
Para Agenvall una de
las posibilidades que se tienen pensadas en este proceso sería a partir de que
Volvo Bus en compañía de Siemens y ABB construyan las estaciones de recarga de
buses y posteriormente Codensa las administre y distribuyan la electricidad a
los consorcios que operen el sistema con los buses híbridos.
Según las perspectivas,
en lo que resta de este año se llegaría a un acuerdo, ya que Pimenta señaló que
para 2016 se instalará la primera de estas estructuras para que atienda las
necesidades del grupo de buses híbridos articulados que se exportarán desde
Brasil hacia Colombia como parte de una prueba piloto para iniciar el
funcionamiento del proyecto hacia 2017.
Hasta el momento se
desconoce a cuánto puede ascender la inversión para las centrales de recarga ya
que a nivel regulatorio deben hacerse modificaciones tanto en la ley colombiana
como la brasileña para definir tanto las patentes tecnológicas como los
materiales que se usarán para la construcción.
Esta apuesta por la
electromovilidad es uno de los negocios más fuertes de Volvo Bus en el mundo,
ya que ciudades como Estocolmo, Viena, Londres, Curitiba, Sao Paulo y Santiago
de Chile han desarrollando sistemas de transporte con el objetivo de reemplazar
combustibles fósiles como el diésel por energías limpias.
Para los híbridos que
están por llegar, los descuentos fiscales realizados por el gobierno, radican
en una reducción de 5% en el arancel; exclusión del IVA y una reducción de
renta.
Marcela Betancourt,
directora del consorcio Express del Futuro, quien opera buses híbridos en
Transmilenio, afirmo que se presenta un ahorro de 38% en el volumen de
combustible y una reducción de CO2 de 75%.
“Pese a que un bus de estas características cuesta entre 30% y 32% más,
existe un ahorro en la operación y se alcanza punto de equilibrio hacia el
séptimo año”, agrego la funcionaria.
Los operadores que usen
esta tecnología dispondrían de ocho años de rentabilidad en su actividad dado
que la vida útil de estos vehículos está tasada en 15 años.
Mientras se hacen todos
los arreglos contractuales, Volvo Bus aún no ha definido cuales podrían ser las
estaciones de suministro eléctrico que operaría Codensa, así como su ubicación
ya que primero se debe escoger la calle por donde iría y luego los intervalos
con los que se necesitarían para recargar, ya que en hora pico es necesario que
los buses no se detengan a recargar sino que marchen, por lo que se necesitaría recargar en las horas valle.
El tiempo que requiere
un bus híbrido para recarga es de seis minutos. Esto permite que durante cada arranque y hasta una velocidad de 28 kilómetros por hora se utilice energía
eléctrica y después de ese tope el motor funcione a base de diésel. Según
Pimenta la idea es que en 2020 lleguen buses totalmente eléctricos.
Fuente: Volvo.
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